Cumplidos los 29 años de vida, Ingeniería Sin Fronteras sigue trabajando en una de sus líneas de trabajo fundamentales: la creación de una ciudadanía crítica, haciendo especial énfasis en el uso de la tecnología para el desarrollo humano y el bien común. El concepto de “Tecnología para el Desarrollo Humano” (o para el bien común y la emancipación, como venimos denominándolo últimamente), parte de cuestionar el uso histórico de la tecnología y apostar por una tecnología participativa y no excluyente que permita lograr la equidad y la justicia social con un enfoque de bien común. Esta herramienta comprende los conocimientos, mecanismos y estrategias que hacen que ciertas soluciones técnicas potencien la calidad de vida de las personas de manera inclusiva. Para esto es necesario entender la tecnología no como un fin en sí incluso, sino como un medio, y dentro de un contexto social, económico y cultural.
Con este proyecto se quiere impulsar el concepto de tecnología para el bien común en la docencia de la comunidad educativa de la enseñanza secundaria gallega de base tecnológica.
Para conseguir este objetivo, el eje principal del proyecto presentado es el inicio de un trabajo, con vocación de continuidad, con 3 centros piloto de enseñanza secundaria, fuera de las 7 grandes ciudades gallegas, en 3 provincias distintas: Celanova, Mondoñedo y Curtis. También se quiere hacer trabajos puntuales en otros centros, que permitan ir ampliando la red y dando a conocer la iniciativa, apoyándose en la asociación APETEGA, en cuya asamblea de primavera 2022 se presentó el proyecto. Habrá tres grandes líneas de trabajo:
- Línea profesorado, especialmente enfocado al profesorado de tecnología o la aquellas acciones de centro en las que la tecnología tenga un papel destacado. Se tratará de acompañar y dar apoyo a prácticas docentes con enfoque de ciudadanía global, dado el papel clave al ser multiplicadoras de cara al alumnado de conocimientos, habilidades y actitudes que pueden fortalecer y poner el foco en los derechos humanos y el bien común. En esta línea se impulsará apoyo en herramientas didácticas, creación participativa de nuevas herramientas, análisis de materiales ya existentes viendo como incorporan la perspectiva de tecnología para el bien común, y la participación en el programa de conocimiento de la realidad en países donde ESF trabaja en cooperación al desarrollo de una persona docente (prioritariamente, de los centros piloto).
- Línea alumnado, por el interés de ESF en promover un alumnado crítico y movilizado, que pueda participar más allá de las acciones académicas formales y vaya obteniendo una base que impulse su ciudadanía activa. Si se consigue alumnado implicado y sensibilizado con la ciudadanía global y el bien común, en su día a día futuro (tanto personal cómo profesional) también podrán ser agentes de transformación. Se propone un catálogo de hasta 20 tertulias/talleres de corta duración en los centros piloto participantes, que se agrupan en packs o itinerarios temáticos (que desde el centro pueden escoger para distintos cursos). Este catálogo también estará disponible para otros centros que ya mostraron interés, y otros que puedan surgir. Ver aquí catálogo e itinerarios. También se trabajará en impulsar alguna acción en cada centro piloto que tenga un mayor recorrido y, sobre todo, mayor protagonismo por parte del alumnado (y el profesorado), a la que se conocerá como Comandos Hacker Sin Fronteras.
- Línea creación de red, por el interés en visibilizar el trabajo que se desarrollará con el proyecto (y otros en la misma línea que se han podido estar ya desarrollando). Se impulsará la creación de una red o grupo de trabajo de profesorado en el campo de la tecnología para el bien común, así como un encuentro de alumnas interesadas en la tecnología de los distintos centros participantes a modo de red, y un Premio Hackers Sin Fronteras a iniciativas docentes de tecnología para el bien común en secundaria.
Se levantará una línea de base para estudiar en qué medida ese enfoque alternativo de la tecnología para el bien común y los derechos humanos es conocida en la comunidad de la enseñanza secundaria tecnológico gallega y qué acogida tiene.
Cabe mencionar el enfoque de género que se pretende incluir en este proyecto, dado que la brecha de género en estudios técnicos comienza ya a notarse en la enseñanza secundaria, tiene una importancia (y dificultad) especial, tanto en la participación, como en la co-responsabilidad del proyecto, como en el comité de seguimiento y las acciones concretas. La red mencionada de alumnas, varios talleres (como los impulsados dentro del programa de mujeres tecnólogas para lo bien común) y propuestas de trabajo en el campo de la brecha de género en la tecnología (incluyendo un pack), o un apartado específico de la línea de base para entender mejor esa brecha de género en los estudios tecnológicos son algunos de los elementos incorporados.
ESF pretende con sus actividades la generación de una ciudadanía global crítica y comprometida con la lucha contra la pobreza a través de la Tecnología para el Desarrollo Humano, para lo cual tendrá en todas ellas un protagonismo destacado el voluntariado de nuestra base social, como co-responsable de su diseño, ejecución, seguimiento y evaluación, teniendo personas colaboradoras dentro del profesorado y también entre las personas que impartirán talleres de distintas temáticas, o haciendo el seguimiento del premio y el programa de conocimiento de la realidad.